Engagement, naturalidad y credibilidad marca de la casa. Hoy te hablamos sobre la autenticidad, la mejor herramienta de éxito y, por extensión, de venta.
Si nos dices que no has escuchado esta frase: “Lo primero de todo, ¿cómo están los máquina”, del cantante almeriense David Bisbal, todo lo que vamos a contarte a continuación carecería de sentido, pero tanto tú como nosotros sabemos que no es así, de manera que no nos detendremos en nuestro alegato.
Este saludo que el artista internacional les dedicaba a sus fans a la salida de un concierto y que, como él mismo confesó, “le salió del corazón” ha dado la vuelta al mundo.
«Este hombre es una leyenda«, «eres el mejor, tío» o «grande, Bisbal» son algunas de las muestras de cariño que le están dejando en este post. ¿Cómo un mensaje tan campechano e improvisado pudo hacerse viral? Lo tenemos claro, estas palabras sencillas y cercanas, lanzadas sin pensar y sin pretensión alguna, nos tememos, golpearon como un potente misil balístico intercontinental causando una onda expansiva de impredecible alcance.
Parece que todo lo que toca el artista lo convierte en oro. Pero tenemos que reconocer que el éxito no es algo fortuito, espontaneo. A lo largo de su trayectoria profesional ha ido labrándose una notoriedad que lo acompañará haga lo que haga. El chaval enérgico que conquistó a la audiencia en la primera edición de Operación Triunfo no ha perdido ni un ápice de ese desparpajo y personalidad arrolladora. Bisbal ha conseguido ganarse el respeto del público de manera que todo lo que dice y hace resulta atractivo, importante o interesante para el resto.
Carlos Alcaraz inició su discurso tras coronarse vencedor del Mutua Madrid Open con esta ya mítica frase y Fernando Alonso fue el primero en hacer una story propia con ella. Proliferan los memes, imitadores y las marcas se hacen eco de su influencia. Como pasó recientemente con el tema viral de Shakira y Bizarrap, pocos se han resistido a emplear en sus campañas este recurso ventajoso con el que esperan aumentar las ventas de sus productos y servicios.
Lo cierto es que a Bisbal le funcionó por su personalidad atrayente, por esa facultad innata que lo lleva a transmitir sensaciones positivas sin que él llegue a darse cuenta. La naturalidad con la que siempre se ha mostrado lo mantiene conectado con su público. UN TIO QUE CAE BIEN, con el que compartimos aficiones o gustos, que nos habla de tú a tú, acaba siendo el REFERENTE PERFECTO, aquel al que le pediríamos consejo o nos gustaría parecernos.
Ha conseguido que se hable de él y de su camaradería tanto dentro como fuera de la red. Un video de escasos minutos protagonizado por el artista internacional logra una real conexión emocional con el público. Esto es de primero de marketing: conseguir que tu audiencia se sienta identificada con lo que estás diciendo o vendiendo es la clave.
Ninguno de nosotros es David Bisbal, está claro, pero si algo nos enseña su carácter directo, simpatía y naturalidad es que, si queremos convencer, llegar y enganchar debemos ser capaces de crear experiencias que involucren, que despierten sensaciones verdaderas más significativas y duraderas.
¡Apuesta por la naturalidad!
En definitiva, si algo debemos aprender es que la naturalidad no se puede maquillar. El secreto está en evitar imitaciones, mantener una comunicación directa y personalizada con nuestra audiencia, defender la coherencia en el contenido y la autenticidad en nuestros actos. No olvides que tus clientes compran tus productos por ti, por cómo eres y lo que alcanzas a transmitir. Muéstrate siempre original y fiel a tu estilo, suma credibilidad, honestidad y valor de marca.